Para viajar dentro de ciertos países europeos, es posible entrar con un documento nacional de identidad en lugar de un pasaporte, dependiendo de tu nacionalidad y destino.
Sin embargo, cada país tiene sus propias normas de entrada, incluidas las relativas a la validez del pasaporte o documento de identidad. Algunos países requieren que el documento sea válido durante varios meses después de la estancia prevista.
Para evitar problemas durante el viaje, consulta siempre los requisitos actuales de entrada con la embajada o la autoridad oficial de inmigración del país al que vas a viajar.